



Dentro de las últimas tendencias en este rubro se encuentran los porcelanatos y cerámicos símil piedra y efecto hormigón, que representan la convergencia entre innovación y evolución. Ambos proponen una relectura de los materiales tradicionales desde una óptica contemporánea, integrando avances tecnológicos, nuevas demandas funcionales y una renovada sensibilidad estética.
Tanto los revestimientos símil piedra como los de efecto hormigón son materiales que responden a las nuevas exigencias del diseño interior: durabilidad, adaptabilidad, bajo mantenimiento y, sobre todo, una estética que interpreta el presente sin resignar profundidad. En tiempos donde el espacio doméstico se concibe como un refugio, pero también como una extensión de la identidad personal, estos revestimientos son una solución altamente versátil y adaptable a múltiples estilos arquitectónicos.
A diferencia de las piedras naturales, que presentan variaciones no controladas y pueden implicar una manipulación compleja, el porcelanato efecto piedra permite una planificación precisa del diseño. Esta opción reproduce con gran fidelidad el aspecto, las vetas y las irregularidades propias de piedras naturales como el mármol, la pizarra o la arenisca, pero con ventajas técnicas notables: mayor resistencia al desgaste, facilidad de mantenimiento, posibilidad de instalación en interiores y exteriores, y una amplia gama de formatos y acabados.

Una característica destacada de esta tendencia es el uso de superficies de gran formato, una elección que responde a la búsqueda de continuidad visual en los espacios y a la intención de reducir las interrupciones generadas por las juntas. Esto no solo aporta una mayor sensación de amplitud, sino que permite que la textura y el tono del material cobren protagonismo.
En muchos casos, se opta por revestimientos en un solo tono, con un diseño de piedra homogéneo, que refuerzan la sobriedad y elegancia del ambiente, especialmente en espacios como salas de estar, halls de ingreso y áreas comunes, donde el objetivo es generar una atmósfera coherente y con identidad visual.
El auge de los revestimientos símil piedra también responde a una tendencia más amplia, que es el retorno de la naturaleza como fuente de inspiración en el diseño interior. Las paletas cromáticas inspiradas en minerales y elementos orgánicos apuntan a crear entornos que transmitan calma, conexión con lo esencial y una estética que, sin caer en lo rústico, se percibe cálida y auténtica.
Por otro lado, el efecto hormigón ha irrumpido con fuerza en los últimos años como una opción de alto impacto visual, capaz de transformar radicalmente la percepción de un espacio. Lo que en otro momento fue un material estrictamente ligado al ámbito estructural y a los códigos del estilo industrial, hoy se redefine como un acabado sofisticado, adaptable y lleno de posibilidades expresivas.
La popularidad del efecto hormigón puede atribuirse en parte a su estética sobria y limpia, que se alinea con los principios del diseño minimalista y con la búsqueda de superficies neutras que permitan destacar otros elementos del entorno. No obstante, más allá de su apariencia monocromática, el cemento aporta textura y profundidad, cualidades cada vez más valoradas por diseñadores y arquitectos en un mercado que privilegia la materialidad visible y táctil.

La evolución de los revestimientos arquitectónicos encuentra en Castellato un actor central dentro del panorama latinoamericano. Reconocida por su liderazgo en el desarrollo de pisos y revestimientos de concreto arquitectónico, la empresa brasileña traduce las tendencias globales en soluciones materiales de alto impacto estético y funcional.
En el universo de la piedra reinterpretada y el hormigón como recurso expresivo, las colecciones de Castellato actúan como inspiración, fusionando tradición, técnica y sensibilidad proyectual:
Colección Tribu
Inspirada en la gráfica y la geometría de las civilizaciones precolombinas, la colección Tribu retoma el legado visual de las culturas mayas para traducirlo en un lenguaje arquitectónico actual. A través de patrones en alto relieve, el concreto cobra dinamismo y profundidad, proponiendo una experiencia táctil y visual que escapa a lo decorativo y se aproxima a lo sensorial. La variedad de diseños disponibles permite múltiples configuraciones para aportar singularidad a cada aplicación y reforzar el carácter escultórico del revestimiento.

Colección Adobe
Con una mirada puesta en la arquitectura vernácula, la colección Adobe reinterpreta la ancestral técnica de construcción con tierra cruda a través del hormigón arquitectónico. Este revestimiento no solo alude a la rusticidad del adobe tradicional, sino que también incorpora las ventajas técnicas del concreto, como la durabilidad, estabilidad dimensional y facilidad de instalación. Su superficie irregular y orgánica aporta una estética cálida y auténtica, ideal para proyectos que buscan conectar con una materialidad más esencial sin sacrificar las exigencias del diseño contemporáneo.

Colección Aparente
La colección Aparente pone en valor la estética propia del concreto como terminación visible y definitiva. Su propuesta responde a una tendencia consolidada: la del hormigón expuesto como protagonista del diseño. A través de placas de gran formato y acabado cuidado, la colección combina sobriedad y fuerza expresiva, adaptándose tanto a interiores como a exteriores. El resultado es una superficie de impronta urbana y contemporánea, que ofrece una alternativa moderna al revestimiento convencional.

Colección Ecobrick Grezzo
Inspirada en la tradición de los ladrillos expuestos, la colección Ecobrick Grezzo reformula esta tipología icónica mediante el uso del concreto arquitectónico. Su pigmentación bicolor y su textura rústica actualizan el lenguaje del ladrillo, dotándolo de una nueva elegancia y mayor durabilidad. En particular, el tono ocre introduce una riqueza cromática que emula los matices naturales de la terracota, permitiendo que estos revestimientos se integren con calidez en contextos tanto residenciales como comerciales.

Colección Shou Sugi Ban
Tomando como punto de partida una técnica ancestral japonesa de preservación de la madera mediante carbonización superficial, la línea Shou Sugi Ban es un revestimiento de gran impacto visual. Esta colección representa un cruce entre memoria material y tecnología contemporánea, capaz de introducir dramatismo y sofisticación a los ambientes, aunque priorizando la durabilidad y resistencia del hormigón.

Colección Pedra Traccia
